El señor MONTESINOS TORRES.— Como está.
El señor MANTILLA CAMPOS.— Disculpe que lo venga a molestar en momentos tan
fastidiosos pero que espero los tome con alegría.
El señor MONTESINOS TORRES.— No, ahí sí estamos (ininteligible).
El señor MANTILLA CAMPOS.— Estar pensando en las torpezas que comete alguna gente,
no.
El señor MONTESINOS TORRES.— Sí, claro.
El señor MANTILLA CAMPOS.— Pero así es la vida.
El señor MONTESINOS TORRES.— La vida política es así.
El señor MANTILLA CAMPOS.— Sí, sí. Una son de cal y otras son de arena.
Mil perdones por insistencia y la majadería.
El señor MONTESINOS TORRES.— No. Yo comprendo.
¿Cómo nos podemos ayudar, así a calzón quitado? Nuestro común amigo ya conversó conmigo,
don Enrique, ya estoy al tanto de la charla que ustedes han tenido, comparto plenamente.
El señor MANTILLA CAMPOS.— Sí. Él es muy afectuoso conmigo, inclusive estuvo a verme
en el hospital.
El señor MONTESINOS TORRES.— Claro, sí.
El señor MANTILLA CAMPOS.— Mire, no le quiero quitar tiempo, amigo.
Nosotros estamos en una situación muy difícil, no podemos hacer campaña electoral y esto
afecta, creo, a todo el esquema, porque nuestra gente al ver que no estamos presentes comienza a
buscar una opción con la tesis del voto perdido.
El señor MONTESINOS TORRES.— Así es. Eso hay que.
El señor MANTILLA CAMPOS.— Y necesitamos reforzar, y perdone la franqueza pero
(ininteligible) que tenemos ...
El señor MONTESINOS TORRES.— Los recursos.
El señor MANTILLA CAMPOS.— Eso es, recursos.
El señor MONTESINOS TORRES.— ¿Cuánto necesitan?
El señor MANTILLA CAMPOS.— De aquí a la campaña con 50 ó 100 nos defendemos.
El señor MONTESINOS TORRES.— Ya vamos a ver. Perfecto. Yo les voy a apoyar. No hay
ningún problema.
La otra cosa es, sabemos que Jorge del Castillo es un tipo peligroso.
El señor MANTILLA CAMPOS.— Así es.
El señor MONTESINOS TORRES.— Muy peligroso (ininteligible). Partidaria, para el futuro.
No lo vamos a poder eliminar porque de todas maneras va a salir.
El señor MANTILLA CAMPOS.— Es cierto.
El señor MONTESINOS TORRES.— Pero sí podemos hacer con alguien que no sea
conveniente.
El señor MANTILLA CAMPOS.— Sacarlo.
El señor MONTESINOS TORRES.— Sacarlo. Usted me tiene que decir, por lo pronto usted
tiene que entrar, eso de cajón, yo me tengo que encargar. Y con usted, a qué otra persona
deberíamos asegurar para que usted tenga el control en el Congreso.
-2-